Para definirla, he tomado tres referencias, su etimología y dos perspectivas académicas, la del teórico checo Lubomír Doležel y la del académico francés Gérard Genette.
Etimología
La palabra “fictio” proviene del latín y es el origen de la palabra “ficción” en español. Proviene del verbo “fingere”, que significa “formar”, “inventar” o “crear”. En latín, “fictio” se usaba para referirse a la acción de formar o crear algo, ya sea de manera real o imaginaria. Con el tiempo, el término evolucionó para referirse específicamente a la creación de cosas imaginarias o ficticias, dando origen al concepto moderno de ficción. Por lo tanto, etimológicamente, la palabra “ficción” está relacionada con la idea de inventar o crear algo que no es necesariamente real, sino imaginario.
Construcción lingüística
Gérard Genette en su libro Ficción y dicción (1991), el autor examina la relación entre la ficción y el lenguaje. Argumenta que la ficción es una construcción lingüística que implica una ruptura con la realidad referencial, creando un mundo alternativo donde las reglas del lenguaje se desafían y reconfiguran.
Mundo posible
Doležel, por su parte, ofrece una perspectiva interesante sobre la ficción en su trabajo Heterocosmica: fiction and possible worlds (1980). Según el autor, la ficción es un fenómeno complejo que involucra la construcción de un “heterocosmos”, un mundo alternativo con su propia lógica interna y reglas. Este mundo ficcional puede diferir del mundo real en aspectos importantes, pero aún así tiene coherencia interna y sigue sus propias leyes establecidas por el autor.
Conclusión
Entonces, qué es la ficción. Una invención constituida en el lenguaje y que proyecta un mundo posible, verosímil desde sus propias reglas.
¿Cuál es tu definición de ficción? Ahora que ya sabes cómo entendemos en este proyecto el concepto de ficción ¿Sabes qué es la minificción? ¿Sabes qué es cineminuto? ¿Qué es la docuficción? Comparte tus respuestas en los comentarios.
