El hilo invisible

El hilo invisible

17 comentarios

  1. Luis Ignacio Muñoz

    Gracias por esta magnífica oportunidad de hacer parte de esta antología a la cual auguro muchos éxitos. Como todas las anteriores puede apreciarse el criterio de selección y la calidad de cada historia. De paso, mis felicitaciones por este gran proyecto que espero sigan adelante para bien de la narrativa breve, de los escritores que y del beneficiario final y otro de los más importantes de este Hilo Invisible: el lector.
    Un abrazo fraterno desde Colombia.

    1. Gracias por tus palabras, estimado Luis Ignacio.
      Por cierto, no sé si las muñecas tenga lengua, pero al parecer si uno corta antes esa parte de la boca, se puede evitar los gritos. Te pasamos la información, por si acaso quemas otra muñeca diabólica. 🙂
      Un abrazo.

  2. Adriana

    Con el microcuento «a través de sus ojos» de Genesis García pude interpretar sobre el estereotipo que tenemos sobre que un hijo siempre será como su padre, pero realmente depende de nosotros que enseñanzas nos quedamos, porque somos seres auténticos que no deberían copiar la identidad ni seguir el legado de alguien.

  3. Camila

    Presencia
    El destino de la vida y de la naturaleza misma está llena de incertidumbre y de escepticismos. Nunca sabremos que pasara y seria aún más difícil evitarlo o incluso predecirlo, es más factible esperar con resiliencia.

  4. Camila

    Costumbre
    A veces las situaciones de la cotidianidad y sus problemas hacen que construyamos barreras invisibles alrededor de ellas, y al momento de querer derribarlas, nos asombra ver el poder que se les había concedido. Sin embargo, lo mejor es saber a convivir con ellas y amarlas con cierto recelo, porque la costumbre del humano es tener barreras, pero la costumbre del sabio es saber cómo derribarlas sin hacerlo con odio y resentimiento.

  5. Camila

    Deseo cumplido
    El niño, sin comprender bien los problemas de sus padres, empezó a dejarse llevar por ellos, al punto de querer agredir su existencia. Para su fortuna o desgracia, el pequeño logro desaparecer para la eternidad.
    Se podría pensar que su confort es ya no ver a sus padres discutir, sino llorar por el.

    Gran historia y excelente narrativa 🙂

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